Ha habido mucha polémica ante la noticia de que todos los jugadores de fútbol pasarán por pruebas del coronavirus para poder comenzar a entrenar, ¿por qué? Porque todavía no se hacen test a todos los sanitarios, quienes sí trabajan contra el virus cada día y tienen más probabilidad de contagio. Sin embargo, los más afectados todavía son los limpiadores, quienes, al pertenecer a empresas privadas, no llegan a estar ni siquiera en la cola de sanitarios que recibirán pruebas, porque se quedan fuera del protocolo.
Así ha denunciado el sindicato Comisiones Obreras (CCOO) que se aceleren la realización de pruebas del coronavirus al personal de limpieza de hospitales y centros sanitarios. En Castilla-La-Mancha, por ejemplo, se ha exigido al Sescam que acelere los procesos burocráticos, pero o siguen en lista de espera o no se les ha confirmado nada todavía. Piden un compromiso en el que se tengan en cuenta las necesidades de los más afectados por el COVID-19. Los trabajadores del sector de la limpieza se encargan de mantener impecables y desinfectadas las zonas más contaminadas por el virus. Y, aun así, no se les tiene en cuenta a la hora de realizar pruebas del coronavirus, hasta que es demasiado tarde y se registran más muertes.
Sobretodo, la queja vendría al saber de la noticia del mundo del fútbol, ya que se facilitan tets para comenzar cuanto antes la liga pero no a quienes luchan al frente del COVID-19 y quienes mantienen los hospitales y centros sanitarios libres de virus, e incluso desinfectan esas zonas donde los jugadores entrenarían o tendrían partidos.
